La empresa Gilma Technology ha obtenido la certificación SAE AS9100C,  necesaria para trabajar en el sector de aviación, aeronáutico, espacial y de defensa, todo un logro si tenemos en cuenta que hasta la fecha, en España sólo 18 entidades cuentan con esta certificación, y sólo 2 de ellas en la Comunidad Valenciana.

El Área de Consultoria de Sistema de Gestión Normativos de FEMPA ha acompañado y ayudado a la consecución de esta certificación que según palabras del Director de I+D+i y Calidad de Gilma Technology, Juan Manuel Gil “ha sido un duro y arduo proceso, de casi dos años, en el que se nos ha analizado la operatividad y trazabilidad con el objetivo de demostrar que tanto el trabajo como la producción que desarrollamos en nuestra empresa cumple con las exigencias de la industria aeronáutica, aeroespacial y defensa y sus normativas oficiales, realizando la auditoria Don Pedro Luis Ferrer, uno de los auditores con mayor reconocimiento en toda Europa en el sector Aeroespacial. Ha sido extremadamente arduo, pero lo hemos suplido con mucha ilusión y trabajo”. A partir de esa ilusión, de la mentalidad de una empresa asentada sobre los fundamentos de la cultura de la producción, de la necesidad de introducir cambios, de la mejora continua y del esfuerzo, Gilma Technology ya ha comenzado a trabajar para el sector de defensa de los EE.UU. con mecanizados de precisión como los realizados para el avión militar P3 Orión.

La SAE AS 9001C:2009, adoptada a nivel europeo y editada por AENOR como UNE - EN 9100: 2010 hace hincapié en aquellas áreas con mayor impacto en la seguridad y fiabilidad de los productos aeronáuticos, espaciales y para la defensa. Tiene como objetivos potenciar las relaciones entre el cliente y la empresa, además de aumentar la eficacia y eficiencia de las empresas, mejorar la competitividad, evitar fallos en la fabricación o servicio y garantizar los trabajos realizados o servicios prestados.

“Con esta norma la empresa está totalmente controlada, optimizada y nuestros productos presentan una trazabilidad perfecta al llevar un seguimiento del producto en todo sus proceso desde que se inicia su fabricación hasta que se comercializa, incluyendo su estocaje”, destacaba Gil, un seguimiento y unos procesos que a partir de ahora se van a aplicar a todos los productos de Gilma Technology porque lo que se pretende, desde esta pyme familiar creada en 1934 y afincada actualmente en Petrer, es potenciar su actividad de siempre, optimizando los recursos y mejorando sus productos, a través de la propia certificación.